FAMILIA MORO GONZÁLEZ, fundadora y propietaria de Bodegas Familiares MATARROMERA
Confirmación de continuidad de la saga familiar en un trimestre colmado de premios y reconocimientos.
El último de ellos, el XXI Premio EFCL “Antonio Pérez”, en el que el jurado valoró la apuesta de la familia por la sostenibilidad, la continuidad generacional de la compañía y el fomento del empleo de calidad en el entorno rural.
Ademas:
Premio Alimentos de España a la Innovación a Bodegas Familiares Matarromera.
Nombramiento de Beatriz Moro como presidenta de la Bodega Win Sin Alcohol.
Asunción de Paloma Moro de la presidencia de Bodegas Emina.
Inauguración de la bodega Casar de Vide junto al presidente de la Xunta de Galicia.
Ponencia de Carlos Moro en el I curso OLINT de organización de empresas oleícolas.
La familia Moro González, fundadora y propietaria de Bodegas Familiares Matarromera, recibió ayer el XXI Premio EFCL “Antonio Pérez” con el que Empresa Familiar de Castilla y León (EFCL) reconoce anualmente la trayectoria de una familia empresaria de la Comunidad Autónoma. En su fallo, el jurado ha destacado la decidida apuesta de la familia Moro González por la sostenibilidad como un concepto establecido en su filosofía personal y familiar, así como su impulso al fomento del empleo de calidad en el entorno rural.
Toda la familia ha acompañado a Carlos Moro en la recepción de este premio, “especialmente emocionante y entrañable”, en palabras del empresario, que además ha destacado que “sentimos un gran orgullo por pertenecer a Empresa Familiar de Castilla y León. Somos, efectivamente, una gran familia de 170 miembros que contribuimos de manera considerable al PIB de Castilla y León, con una facturación global de más de 10.000 M€ y creando más de 51.000 puestos de trabajo”.
Bodega Matarromera fue fundada en 1988 en Valbuena de Duero (Valladolid) por Carlos Moro, cuya familia lleva ligada a la elaboración de vino en Castilla y León desde hace cientos de años. Los antecedentes de esta empresa familiar se remontan a los abuelos y padres de Isabel y Carlos Moro, Mª Consolación y Ursicino, y ahora le dan continuidad sus hijas Paloma y Beatriz Moro. Actualmente Bodegas Familiares Matarromera es un grupo empresarial con 11 bodegas 7 Denominaciones de Origen (Ribera de Duero, Rueda, Toro, Cigales, Rioja, Ribeiro y Rías Baixas) y más de 800 hectáreas de viñedo propio en las mejores zonas de Castilla y León, Rioja Alta, Ribeiro y Rías Baixas.
Además de la elaboración de vino, la compañía ha diversificado su actividad a la elaboración de aceite de oliva Oliduero, procedente de sus 140 hectáreas de olivos de las zonas de Toro y Medina del Campo, y a la producción de energía solar, con dos plantas en las localidades vallisoletanas de Piña de Esgueva y Cubillas de Santa Marta. El galardón reconoce su trayectoria y liderazgo en la creación de vinos de excelencia, así como su aportación a la I+D+i, la creación de los vinos Sin Alcohol Win, y la sostenibilidad en el sector vitivinícola.
Para alcanzar estos objetivos, Bodegas Familiares Matarromera ha aunado la tradición, la sostenibilidad y la calidad con la innovación, que es otra de las firmes apuestas de la empresa, que ha destinado a I+D+i una inversión de 45M € desde sus inicios y posee 13 patentes propias a nivel mundial. La Familia Moro González ha desempeñado un papel fundamental en el desarrollo económico de Castilla y León, generando empleo, fomentando la inversión en la región y contribuyendo al fortalecimiento de la comunidad local. Su compromiso con la responsabilidad social empresarial se ha traducido en numerosas iniciativas de apoyo a la educación, la cultura y el bienestar de la sociedad.
Todo ello se plasma, entre otras acciones, en la creación de la Fundación Carlos Moro de Matarromera. Junto a estos factores, el jurado también ha valorado la continuidad generacional de Matarromera, en cuya gestión están incorporadas desde el año 2021 las dos hijas del fundador, Paloma y Beatriz Moro.
El jurado de la edición 2023 del premio estuvo integrado por Jesús Ángel Acebes, director de Zona de Cajamar; Santiago Toca, director de la oficina Centro de Aon; Carlos Martín Tobalina, viceconsejero de Economía y Competitividad de la Junta de Castilla y León; Agustín Sigüenza, director general de Formación Profesional; Teresa Cetulio, secretaria general de CEOE Castilla y León; Marian Hidalgo, secretaria general del Consejo de Cámaras de Castilla y León; Alberto Cagigas, director de la revista Castilla y León Económica; José Luis Zurro, socio de Garrigues, y Jesús Esteban, miembro de la familia propietaria de Harinera Emilio Esteban, S.A., que fue galardonada con este premio el pasado año.
BODEGAS FAMILIARES MATARROMERA recibe el Premio Alimentos de España a la Innovación
El jurado valoró el carácter pionero de la compañía en el desarrollo del vino sin alcohol.
La empresa recibió el Premio Alimentos de España en la categoría de Industria Alimentaria en 2011.
Bodegas Familiares Matarromera recibió el Premio Alimentos de España a la Innovación por su “labor en digitalización, sus iniciativas en medio ambiente por el desarrollo e implantación de sistemas de energía alternativas, o la instalación del primer sistema de recarga de coche eléctrico en el área rural”. El galardón, concedido por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, reconoce sus 35 años de trayectoria y su liderazgo en la creación de vinos de excelencia (Emina, Matarromera, Cyan, etc) en 7 Denominaciones de origen, así como su aportación a la I+D+i, la creación de los vinos Win Sin Alcohol, y la sostenibilidad en el sector vitivinícola.
El jurado ha resaltado además “su apuesta por la innovación y por ser pioneros en las nuevas técnicas de desalcoholización del vino, para dar respuesta así a nuevas tendencias de consumo, así como su compromiso social, su plan de igualdad y su contribución al reto demográfico por la localización de sus bodegas en el medio rural de Castilla y León, La Rioja y Galicia, y sus iniciativas en enoturismo”.
Estos premios se convocan desde 1987 y constituyen uno de los instrumentos de promoción y apoyo al sector agroalimentario que con mayor éxito desarrolla el Ministerio Agricultura, Pesca y Alimentación por contribuir al reconocimiento del trabajo de entidades, empresarios y profesionales que se han distinguido por producir, elaborar, comercializar y ofrecer al consumidor alimentos de calidad, con métodos y tecnologías avanzadas y respetuosas con el medio ambiente.
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación en funciones, Luis Planas, entregó el premio a Carlos Moro en un acto celebrado en el Teatro Real de Madrid. En palabras del presidente de la compañía, “consideramos la innovación como parte esencial de nuestra filosofía de actuación y creemos firmemente en ella y su posibilidad de generar valor. Este premio supone un inmenso honor y nos anima a redoblar nuestros esfuerzos en I+D+i en nuestras bodegas y cultivos y aportar nuestro granito de arena para el crecimiento y la prosperidad de la industria alimentaria en España”.
Su ambicioso plan de reducción de emisiones y huella de carbono junto al plan de reducción de huella hídrica agrícola y bodeguera son algunos proyectos lideres en materia de sostenibilidad que lleva a cabo la empresa, así como la aplicación de la “economía esférica”, que consiste en el máximo aprovechamiento de productos y coproductos a lo largo de toda la cadena de producción, y el innovador “Sistema Oresteo” para el proceso de fermentación, o la utilización de residuos de uva para las etiquetas de sus vinos de Agricultura Ecológica.
En el caso de Emina, es una bodega pionera en innovación en la industria vitivinícola, que apuesta desde su fundación por la calidad y la sostenibilidad. En este marco, con el objetivo de trazar las emisiones de CO2 en su proceso de producción, la bodega se convirtió en 2010 en todo un referente al ser la primera empresa española que calculó la huella de carbono en uno de sus vinos, obteniendo la certificación de AENOR precisamente por Emina Verdejo.
Bodega Matarromera está sumamente integrada en la Industria 4.0 y se emplea visión artificial en todos sus procesos productivos, como por ejemplo la mesa de selección de uvas o un sistema pionero por el que se garantiza que el nivel de llenado sea el correcto; la detección de posibles defectos en el cuello de la botella; la correcta presencia del tapón de corcho y etiquetado; el control final del encajado de botellas, así como la trazabilidad de las mismas.
La compañía demuestra una vez más su buen hacer en el sector agroalimentario de España, y este premio se une a los múltiples reconocimientos por la empresa, que ya recibió el Premio Alimentos de España en la categoría de Industria Alimentaria en 2011.
Paloma Moro asume la presidencia de Bodegas Emina
Potenciando la apuesta por la calidad y compromiso con la internacionalización.
Paloma Moro asumió este mes de septiembre el cargo de presidenta de Bodega Emina S.L., tomando el relevo de su padre, Carlos Moro, que se mantiene como presidente de Bodegas Familiares Matarromera. Licenciada en Administración y Dirección de Empresas con especialización en Dirección Estratégica, ha estudiado y trabajado tanto en España, como en Francia, Inglaterra y Dinamarca y ha ocupado puestos de dirección en multinacionales danesas durante varios años. Es Catedrática de Innovación y Emprendimiento en la Universidad de Copenhague y cuenta con una amplia trayectoria en puestos de dirección de grandes empresas internacionales, así como en la creación de empresas propias.
Tanto Paloma Moro como su hermana Beatriz forman parte del Consejo de Administración de la compañía desde 2021, asegurando así el futuro familiar de la misma y potenciando la apuesta por la máxima calidad y excelencia de sus vinos y compromiso con la internacionalización que ha llevado a cabo el grupo desde sus inicios.
Aunque reside desde hace años fuera de España, Paloma Moro lleva desde muy niña involucrada en el desarrollo de Emina, participando incluso en el diseño de sus primeras etiquetas. Con una amplia experiencia en puestos de dirección, aportará su visión estratégica para impulsar el crecimiento y consolidar la posición de la bodega como referente en la industria vinícola.
En palabras de Paloma, “es un honor y un reto precioso asumir la presidencia de Bodega Emina. Viví muy intensamente su nacimiento y me hace especial ilusión continuar impulsando la calidad de sus vinos, así como fortalecer nuestra posición en el mercado nacional e internacional”. La experiencia internacional de Paloma aporta también un aire nuevo a las áreas de responsabilidad social de la empresa.
Bodega Emina ha experimentado un crecimiento sostenido en los últimos años, posicionándose como una de las bodegas más destacadas de Castilla y León. Con el nombramiento de Paloma Moro como presidenta, la compañía potenciará aún más su presencia en los mercados globales y consolidará su liderazgo en la elaboración y comercialización de vinos de alta calidad. Desde blancos de la D.O Rueda como Emina Verdejo Fermentado en Barrica, hasta tempranillos de la D.O Ribera del Duero como Emina Emoción, un vino de autor, complejo y elegante elaborado con uvas de la mítica Valbuena de Duero, pasando por rosados de la D.O Cigales como Emina Rosé Prestigio. Son vinos que responden a una nueva demanda por parte de un consumidor exigente y conocedor de las nuevas tendencias en la elaboración de vinos y todos tienen en común su compromiso con el medio ambiente gracias a su gestión sostenible.
Paloma y Beatriz Moro darán continuidad a un legado construido generación tras generación e impulsado por su padre desde el año 1988. Hijo, nieto, biznieto y tataranieto de viticultores no estaba dispuesto a interrumpir la cadena familiar, sino a potenciarlo y mejorarlo, como está haciendo. Sus once bodegas están presentes en siete de las denominaciones de origen más importantes de nuestro país y sus vinos llegan a más de 80 países.
Fundada en 1995, Bodega Emina concibe la innovación y la sostenibilidad como una actitud y un concepto establecido en su filosofía, parte intrínseca de su estrategia empresarial. Se trata del primer centro integral de desarrollo sostenible del sector vinícola. Además, fue la primera empresa española con certificación AENOR que midió su huella de carbono. Cuenta con el certificado Wineries for Climate Protection, consorcio impulsado por la Federación Española del Vino en el que participa de forma activa liderando la estrategia del sector vitivinícola nacional en defensa del medio ambiente. Desde 2021 forma parte de International Wineries for Climate Action (IWCA).
Beatriz Moro, nombrada presidenta de la Bodega Win Sin Alcohol
Asume este cargo con la responsabilidad de potenciar los vinos sin alcohol y posicionar este producto en todo el mundo.
Este pasado 13 de noviembre, Bodega Win Sin Alcohol, empresa líder en la producción de vinos sin alcohol, anunció el nombramiento de Beatriz Moro como presidenta de la compañía. La hija de Carlos Moro asume así el liderazgo de la propuesta de Bodegas Familiares Matarromera para los nuevos consumidores de vino sin alcohol, un producto saludable y revolucionario. Asume este puesto con el objetivo de reforzar la compañía y aumentar la presencia de estos vinos en el mercado nacional e internacional.
Licenciada en Publicidad y RRPP, durante varios años desarrolló su labor profesional en torno a la comunicación en Madrid y Berlín. Tras esta experiencia, regresó a la empresa familiar, donde trabajó mano a mano con su padre en el desarrollo de proyectos como el del vino sin alcohol, muy incipiente en aquellos años. Como ella misma reconoce, “Tanto mi hermana Paloma como yo hemos crecido entre viñas y he tenido el privilegio de trabajar muy cerca de mi padre desde muy temprana edad. Las bodegas son para mí como hermanas pequeñas que he visto crecer a lo largo de muchos años”.
Tras participar en la creación del vino sin alcohol, “la difusión de la salud física y mental me motivó a emprender durante 13 años en diferentes proyectos relacionados con el bienestar, el yoga y la meditación en EEUU y Reino Unido, pero sin olvidar mi estrecho vínculo con la empresa familiar como miembro de su Consejo de Administración”. “Hoy regreso a España, para aportar mi visión general en las diferentes bodegas y en particular en la Bodega WIN Sin Alcohol, alineando una filosofía propia con una necesidad social”.
El vino sin alcohol es una de las tendencias del sector actualmente. La preocupación por el bienestar y los productos saludables es una inquietud creciente en nuestros días. Los consumidores actuales tienen una mentalidad moderna y comprometida con la salud y el medio ambiente y desean experimentar con bebidas atractivas, saludables, sostenibles y sin alcohol ni azúcar añadido. Según el último informe de Wine Intelligence, el 58% de los españoles jóvenes menores de 34 años afirman “moderar la ingesta de alcohol”, eligiendo productos de baja o cero graduación como alternativa.
La empresa vitivinícola vallisoletana comenzó a investigar en 2003 sobre los vinos sin alcohol, y hoy en día mantiene un completo portfolio de referencias aptas para todos los públicos, en especial para aquellos que no pueden o no quieren beber alcohol, muy demandadas también en los mercados internacionales. Las distintas referencias de WIN y Sonríe, las dos marcas que comercializa la empresa, se elaboran en la bodega Win Sin Alcohol, en Valbuena de Duero (Valladolid), a través de un proceso de elaboración totalmente natural, pero partiendo de un vino natural elaborado con uvas de sus propios viñedos.
Bodega WIN Sin Alcohol es fruto de un proyecto de investigación iniciado en 2004 y que satisface esta demanda de productos sin alcohol y bajos en calorías, pero que mantienen prácticamente la totalidad de aromas y sabores del vino. Además, estos vinos sin alcohol no contienen azúcares y cuentan con certificado vegano. Esta Bodega es un hito español de innovación al ser la primera del mundo capaz de desalcoholizar un vino natural hasta un contenido alcohólico de 0% grados. Se trata de un proceso de elaboración exclusivo desarrollado de manera íntegra en España.
El proceso de elaboración del vino desalcoholizado comienza en el propio viñedo, mediante diferentes tratamientos vitivinícolas para obtener una uva con un bajo grado alcohólico probable y eligiendo el momento adecuado para vendimiar. Posteriormente, esta uva es sometida a una vinificación que permite obtener un vino de elevada aromaticidad y un grado bajo de alcohol. Win y Sonríe se elaboran a partir de vinos blancos o tintos, procedentes de uvas de las variedades Verdejo o Tempranillo de viñedos situados en dos de las principales Denominaciones de Origen de nuestro país como son Ribera del Duero, Cigales o Rueda.
La Bodega elabora estos vinos gracias a un proceso patentado y respetuoso con la materia prima de manera que se separan los aromas y el alcohol del resto de componentes. Así, las propiedades organolépticas se mantienen muy parecidas a las del vino con alcohol, conservando todas sus bondades: polifenoles, antioxidantes y antocianos.
CASAR DE VIDE, la primera bodega de CARLOS MORO en la D.O. Ribeiro, inaugurada por el presidente de la Xunta de Galicia
Alfonso Rueda destacó la contribución de esta bodega para el reconocimiento mundial de la Denominación de Origen Ribeiro
Aunque lleva elaborando vinos en la DO Ribeiro desde 2017 con CM Viña Tenencia, es ahora cuando el bodeguero y empresario Carlos Moro ha inaugurado Casar de Vide, su bodega de Castrelo de Miño. El acto institucional, celebrado a finales de septiembre, contó con la presencia del presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda. En palabras del empresario y bodeguero, “tras años de reacondicionamiento y mejoras para dotarlo de la más avanzada tecnología enológica, podemos por fin abriros la puerta de nuestra Casar de Vide, la casa de la vid, nuestra casa y también la vuestra.”
La bodega, situada a escasos metros del río Miño, ha sido renovada por completo, implementando nueva maquinaria como un conjunto de intercambiador de frío, sistemas de digitalización y maquinaria de alta tecnología para sus procesos de elaboración y en el ámbito de la producción, la transformación y la comercialización. De igual manera, se ha mejorado la eficiencia energética de la bodega y han instalado sistemas de producción y almacenamiento de energía fotovoltaica, ya que la sostenibilidad es uno de los pilares de la compañía. Reducir su consumo energético, contribuir a la reducción de las emisiones acorde a los criterios de la ONU y ser más respetuosos con el medio ambiente es uno de sus principales objetivos.
Desde su adquisición en 2019, Bodega Casar de Vide ha ganado presencia en el mercado gracias a sus cualitativas elaboraciones siguiendo métodos de elaboración de alta tecnología unidas a la forma tradicional de esta denominación de reconocimiento internacional.
Por su parte, el presidente de la Xunta de Galicia ha destacado que “agradecemos enormemente el trabajo de grupos enológicos tan prestigiosos como Bodegas Familiares Matarromera por invertir en un sector de tanta trascendencia como nosotros como es el vino y contribuir a la enorme riqueza que representa este sector para Galicia. No cabe duda de que bodegas como Casar de Vide contribuyen al éxito de los vinos gallegos”. Esta bodega es el testimonio del compromiso de la compañía con la calidad y la innovación en la producción de vinos excepcionales, como son Casar de Vide y CM Viña Tenencia, los dos vinos que elabora la bodega.
Casar de Vide Treixadura
Casar de Vide es un Ribeiro con un medido coupage de las más selectas variedades de esta zona ancestral. Un exhaustivo trabajo de ensamblaje en la bodega ha permitido transferir al vino estilo, carácter y equilibrio.
Los viñedos con los que se ha elaborado este vino se encuentran a ambas orillas del río Miño, con distintas orientaciones para que la Treixadura expresase diferentes matices: unos de frescura en las orientaciones más umbrías, y otros de madurez en las más expuestas, respetandosiempre el carácter atlántico que se respira en el paisaje dondeabundan carballos, mimosas y pinos gallegos, sobre un profundo suelo silíceo.
CM Viña Tenencia
CM Viña Tenencia es un vino blanco elaborado a partir de uvas procedentes de viñedos que llevan su nombre en la zona más cualitativa a orillas del río Miño, en unos fértiles terrenos silíceos, provenientes en parte de la descomposición del granito.
La ladera donde son cultivados sus viñedos está orientada al norte, enclavada en el valle del Miño en el que están presentes las variedades autóctonas más representativas de la D.O. Ribeiro: la Treixadura, la Godello o el Albariño. Este Ribeiro forma parte de la colección Vinos de Finca de CM. Tras la selección de las uvas en el viñedo, ya en bodega se procede al perfecto ensamblaje del coupage definitivo y su crianza en finas lías que aportan el carácter y equilibrio a este vino de producción limitada.
Casar de Vide, ‘La Casa de la Vid’
La Bodega está ubicada en pleno corazón de la D.O. Ribeiro, la más antigua de Galicia, a escasos metros del propio río Miño. Casar de Vide se ha convertido en una de las referencias vitivinícolas de dicha región donde la excelencia y la calidad son señas imprescindibles de identidad, tanto en sus métodos de producción como en sus admirados vinos. Para Carlos Moro, “este proyecto responde a nuestro deseo de continuar elaborando vinos singulares de las comarcas más diferenciales de nuestro país”.
La bodega se asienta sobre una superficie de 2.200 metros cuadrados y fue construida en 1988 con piedra granítica de cantería junto a la vivienda histórica, fundada en 1957. Dispone de nave de recepción de uva y procesado, nave de fermentación y almacenamiento, sala de embotellado y filtrado, zona de producto terminado y una zona social para visitas y catas, todas recientemente renovadas. Los equipos enológico y viticultor, con Emilio y María Vidal, son la base para la elaboración de vinos con las mejores uvas autóctonas de la D.O. Ribeiro.
CARLOS MORO, ponente en el I curso OLINT de organización de empresas oleícolas
La revista Olint, junto con la UJA y Juan Vilar organizaron a mediados de octubre un curso destinado al aprendizaje completo de todos los aspectos que conforman el tejido organizativo y productivo de una empresa oleícola.
Pero no sólo de vino vive el hombre. Con una trayectoria de más de 35 años dedicada al sector agroalimentario, hablar de Bodegas Familiares Matarromera y de la Almazara Oliduero es hacerlo sobre sostenibilidad, lucha contra el cambio climático, calidad e innovación motor de crecimiento del sector.
La sociedad y las empresas en particular se enfrentan en la actualidad a un nuevo marco de trabajo que va a marcar un antes y un después en su actividad. El cambio climático y la necesidad de luchar contra él, ha traído a primera línea estratégica de las empresas los conceptos de sostenibilidad y eficiencia.
El "I curso OLINT: organización de empresas oleícolas" pretende acercar a los participantes a esta nueva realidad donde el uso de las nuevas herramientas tecnológicas, la concentración de la oferta, el posicionamiento de marca, o la comprensión de los nuevos parámetros que rigen el criterio de elección del consumidor son necesarios para alcanzar la ansiada sostenibilidad ambiental y económica del sector oleícola.
Carlos Moro impartió una ponencia en el bloque de “Comercialización y Marketing”, donde analizó en profundidad las similitudes y diferencias entre el AOVE y el vino en la estrategia de marketing.
La Almazara Oliduero, inscrita en el Régimen de Agricultura Ecológica, incorpora numerosas prácticas sostenibles en sus procesos de producción: minimización y uso eficiente de recursos y ahorro energético, con la apuesta por la biomasa procedente de coproductos como el hueso de aceituna. La energía obtenida con el uso de la biomasa permite llevar a cabo el proceso productivo oleícola y la climatización del interior de la almazara.
Los eventuales efluentes que puedan producirse en el proceso oleícola son tratados convenientemente en la EDAR (Estación Depuradora de Aguas Residuales) existente en la parcela y aprovechados para uso agronómico como el riego. La almazara emplea una maquinaria tecnológicamente puntera e innovadora, que prima el respeto a la materia prima para obtener un aceite de oliva virgen extra de máxima calidad. Se aplica el empleo de última tecnología con consumo “cero” de agua en el proceso oleícola para obtener un aceite de oliva virgen extra de máxima calidad y la recolección se realiza mediante medios mecánicos evitando que el fruto caiga al suelo y se dañe o ensucie.
Bodegas Familiares Matarromera
Bodegas Familiares Matarromera es una de las firmas de referencia dentro del panorama vitivinícola nacional e internacional gracias a su presencia en 7 Denominaciones de Origen a través de sus 11 bodegas: Ribera del Duero (Bodega Matarromera, Bodega Emina Ribera y Bodega Renacimiento), Rioja (Bodega CM de Matarromera), Rueda (Bodega Emina Rueda), Cigales (Bodega Valdelosfrailes), Toro (Bodega Cyan), Ribeiro (Bodega Casar de Vide y Bodega Sanclodio), Rías Baixas (Bodega Viña Caeira), y Bodega Win Sin Alcohol, con las que lleva el nombre de España a lo largo de los más de 80 países donde se pueden encontrar sus productos.
Su búsqueda constante de proyectos punteros en I+D+i ha hecho posible que la compañía sea líder en I+D+i y sostenibilidad en el sector bodeguero en todo el mundo.
Su ambicioso plan de reducción de emisiones y huella de carbono junto al plan de reducción de huella hídrica agrícola y bodeguera son algunos proyectos líderes en materia de sostenibilidad, así como la aplicación de la “economía esférica”, que consiste en el máximo aprovechamiento de productos y coproductos a lo largo de toda la cadena de producción.
Desde el inicio de la actividad hay dos cuestiones que se han fomentado activamente, por una parte, el desarrollo de productos más naturales, saludables y ecológicos y por otra, la adopción de numerosas iniciativas enmarcadas en la protección del medio ambiente. Éstas y otras acciones permiten que la empresa sea un referente en la materia reconocido nacional e internacionalmente.
